Denuncian el abandono de los hijos de Nilda Nuñez
A 7 meses del brutal femicidio de Nilda Nuñez, denuncian el estado de abandono de sus hijos, no solamente refieren a las serias dificultades económicas y de condiciones de vida, sino que además no se les ha brindado ningún tipo de asistencia profesional a los menores y tampoco hay un acompañamiento de la familia en relación a la crianza de los hijos de Nilda. Solicitan que el Gobierno de Tierra del Fuego lleve adelante acciones tendientes a asegurar que se garanticen los derechos de los hijos de Nilda.
Desde las redes sociales solicitan la difusión de una carta abierta que denuncia el estado de abandono de estos niños que según explican hoy están huérfanos, por la OMISIÓN DE AYUDA del Gobierno en un caso de violencia de genero.
Se cumplen 7 meses del femicidio de Nilda Núñez que estremeciera a toda la provincia de Tierra del Fuego. Lamentablemente esa atención social y el hormiguero político generado inmediatamente no tuvo como consecuencia una vida mejor para los hijos de Nilda. Sabemos que todo femicidio está enmarcado en una cultura y unas prácticas estatales solidarias con las diversas formas de la violencia de género.
Tras el allanamiento en la vivienda en la que vivía Nilda junto a sus hijos (y las recurrentes invasiones a ese hogar de su femicida) se produce la detención de Aldo Javier Núñez y se da acogida a los niños con una familia residente en la ciudad de Tolhuin.
Los hijos de Nilda, hoy de 6 y 2 años respectivamente, convivieron durante 11 días con esta familia de acogimiento. Durante ese tiempo Tolhuin conoció una inusitada dedicación del Gobierno Provincial representado por sus más altas funcionarias y una también novedosa hiperactividad del poder judicial. Como parte de estas intervenciones el Gobierno de la provincia de Formosa se hizo cargo del traslado desde esa provincia a la de Tierra del Fuego de parte de la familia de Nilda.
Ante la presencia de estos familiares de Nilda y sus hijos la justicia fueguina decidió otorgarle la tenencia del hijo mayor y la guarda provisoria de su hijo menor al padre de Nilda. Esto se efectivizó de modo inmediato y los niños partieron a la provincia de Formosa junto a su abuelo y su tía.
Más allá de la sorprendente celeridad de la justicia fueguina no pretendemos en principio cuestionar el fondo de esa resolución sino el hecho de que no se haya contemplado la garantización de los derechos básicos de estos niños ni las necesidades derivadas del brutal femicidio que sufriera su madre. Como si dijeran: “ya está, ya no son un problema para la provincia” y pretendieran borrar de un plumazo la falta de políticas públicas en relación a las violencias de género a punto tal de que casi a modo de confesión se crea, de apuro y sin mucha claridad, una oficina policial de atención a mujeres en situación de violencia de género.
Una vez arribados los hijos de Nilda a la provincia de Formosa continúa esta saga de promesas y abandono estatales. Más allá de pomposas declaraciones la situación en la cual hoy se encuentran tanto los hijos de Nilda como su familia de origen no solamente está atravesada por las serias dificultades económicas y de condiciones de vida penosamente comunes en buena parte de nuestra América, sino que además de no recibir ningún tipo de asistencia profesional específica en relación a, como decíamos, las inevitables consecuencias del brutal asesinato de su madre, tampoco existe un acompañamiento profesional que permita apuntalar los cuidados de la familia en relación a la crianza de los hijos de Nilda. Pese a los dichos de una alta funcionaria del Gobierno fueguino nadie se comunica con la familia de Nilda presentando algún interés en el estado de los niños desde la provincia de Tierra del Fuego.
Por todo esto, es que denunciamos al Estado Fueguino por no velar por el interés superior de los hijos de Nilda priorizando, acaso, intereses políticos. Demandamos por lo tanto a que el Gobierno de Tierra del Fuego lleve adelante acciones tendientes a asegurar que el Estado de la provincia de Formosa garantice los derechos de los hijos de Nilda. Esta valiente mujer que como tantas, llegó a la provincia de Tierra del Fuego con el sueño de tener una vida mejor para ella y para su hijo mayor; dando a luz a su segundo hijo en esta provincia.
Exigimos la pronta atención de las necesidades de los hijos de Nilda y su familia por parte del Gobierno de la provincia de Formosa. El Gobierno Formoseño debe garantizar una vida plena de derechos a esta familia largamente vulnerada.
No queremos más femicidios.
No queremos más abandonos de los hijos de víctimas de femicidios. De esos Estados corresponsables de esos mismos femicidios que siguen así produciendo daño entre los más vulnerables.